lunes, 27 de octubre de 2014

RUY BELO / EL CORRER DE LOS DÍAS

RUY BELO /
 EL CORRER DE LOS DÍAS 




Ruy Belo 
El correr de los días (fragmento)

Escribir significa para mí morir poco a poco, anticipando el definitivo regreso al humus. Escribo tal como vivo, como deseo languidecer. En cada palabra me suicido, en cada palabra puedo cambiar el orden y la armonía. Escribir es matar y matarme.
La poesía es un acto de insubordinación a todos los niveles, desde el nivel lingüístico como herramienta comunicativa hasta el nivel de conformismo en connivencia con el orden establecido. 
"

El Poder de la Palabra
epdlp.com



Ruy Belo La senda de la poesía (fragmento)

Hacer un poema es en el fondo es un acto de humildad, es dejar a un lado los suspiros, las actitudes, olvidarse de movimientos y tendencias, de amigos y de aquella madrina que deposita grandes esperanzas en nosotros, e inmolar a determinadas palabras toda la poesía posible. "

El Poder de la Palabra
epdlp.com

Ruy Belo Asentamiento

En tu amor por mí hay una calle que comienza
Ni árboles ni casas existían
antes que tuvieras palabras
y todo un corazón fuese para ellas
Te invento y el cielo azulea sobre esta
triste condición de tener que recibir
de los chopos donde cantan
los pájaros imposibles
la nueva primavera
Suenan campanadas y levantan el vuelo
todos los cuidados
Oh mi amor, ni mi madre
tenía un regazo así
como tiene este día
Y llego y me siento al lado
de la primavera. 
"

El Poder de la Palabra
epdlp.com


 Escritor portugués. Se doctoró en Derecho Canónico en la Universidad Gregoriana de Roma y se licenció en Derecho en Lisboa. Como poeta, publicó Aquele Grande Rio Eufrates (1961), O Problema da Habitação - Alguns Aspectos (1962) y A Margem da Alegria (1974) y, como crítico, La senda de la poesía (1969). Su lenguaje poético establece un equilibrio entre el carácter reflexivo, derivado de vivencias religiosas o metafísicas; el aprovechamiento de técnicas discursivas de vanguardia; y una percepción aguda de la realidad. Sus imágenes se centran en la ciudad, ligadas a preocupaciones solidarias o a la evocación de la infancia y de la muerte, a través de una hábil utilización irónica del lenguaje cotidiano o de la referencia cultural.  © eMe
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Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré 
Génesis, 26, 3
Wer jetzt kein Haus hat, baut sich keines mehr 
[Quien ahora no tenga casa, ya no la construirá]
Rainer Maria Rilke
O problema da habitação. Alguns aspectos (1962). El problema de la habitación. Algunos aspectos (2009). 47 años separan el poemario del portugués Ruy Belo de su reciente traducción al español. Da que pensar, sobre todo teniendo en cuenta el tremendo peso poético que tuvieron sus versos en Portugal durante las décadas de los 60 y 70, y que hoy, transcurrido mucho tiempo desde su muerte, continúan teniendo.
Es difícil asimilar un clásico de la poesía de nuestro país vecino como si de un poeta novel y desconocido se tratase. Da que pensar: en las fronteras, en las limitaciones lingüísticas, en esa peligrosa e imperceptible distancia que produce siempre la proximidad. En todo esto hay una reflexión no sólo editorial, sino también cultural, donde la poesía se margina casi hasta el olvido. Precisamente esta demora en la traducción es también, como manifiesta el título del poemario, un claro ejemplo de problema de habitación: los largos poemas de Belo se rehacen en lengua española para, al final, hacerse hueco y tener un nuevo lugar que frecuentar en la poesía escrita en español. De alguna manera, Ruy Belo se localiza de nuevo: Ediciones sequitur, Madrid 2009. Y en ese sentido trashumante en el que se lee el verso-a-verso de estos poemas, podemos reivindicar su necesaria traducción: el sentido de la poesía es siempre un sentido por hacer (Jean-Luc Nancy), idea que Belo, -junto a otros poetas portugueses sí traducidos como Herberto Helder, Luzia Neto Jorge o Carlos de Oliveira-, expresa mediante una alta labor estética, la de conocer distintamente una realidad que se agota. Ahora, en español, se leen sus poemas como en 1962: con aquella misma insatisfacción y esa batalla contra la permanencia bajo la soledad de lo habitual. Pero –qué duda (ontológica) cabe- con una resistencia mayúscula por seguir existiendo, en este caso bilingüemente. Al igual que en la cita que encabeza el libro (É obrigatória a inscrição no registro civil dos factos essenciais relativos ao individuo… nomeadamente dos nascimentos, casamentos e óbitos. Art.º 2.º do decreto-lei de 18/2/1911), doy cuenta de su nuevo registro poético para que así conste a efectos legales: ISBN 978-84-95363-50-3.
Una especie de celebración: Y la alegría es una casa demolida. Comienza, de nuevo, El problema de la habitación para Ruy Belo.
De muy lejos venida, inviable recuerdo
indeciso en las manos o consentido
por alguna imposible infancia
Y la alegría es una casa recién-construida.
.
La mudanza, en el aspecto inmobiliario, es una rara mezcla de trabajo tonto y de alegre cansancio. En el ámbito poético, la habitación es, paradójicamente, un trasiego entre verso y verso, entre espacios y lugares, entre tiempo y otros tiempos. Y las sensaciones se hacen efectivamente variables: la alegría hace las veces de tristeza, el trabajo es la ceremonia del día a día. El poeta se sabe nómada, aunque nunca lo reconoce: allá donde la vida multiplica el paisaje / y la naturaleza acepta humanos movimientos. Ruy Belo se da origen no en un lugar, sino en cada uno de los lugares por los que transita su voz. Por eso, el lugar del poeta portugués es la totalidad del poema mismo que, a través de unos versos de largo recorrido, deja en entredicho a la patria poética enunciada por Heidegger respecto a Hölderlin en sus famosas Aclaraciones a la poesía de Hölderlin. El entredicho, según las ideas de Eduardo Milán, es donde el poeta reside, un medio que en este poemario se muestra en tanto que ciudad cotidianamente en construcción (o en estaciones de transición: otoño y primavera, con habitantes, con turistas y ruidos de fondo). El deseo de una habitación para el poeta se ve abocado a una convivencia dondedepositamos en los vecinos cimientos, por lo que este entredicho es, de alguna manera, un mediar palabras y un compartir gestos. El yo cimentado en el otro. La soledad andamiada por la sociedad. Belo no busca, pues, una tierra original que habitar ni acercarse a la esencia divina (de la que habla siempre, aunque desde una religiosidaddes-medida: la distancia insalvable entre cielo y tierra, que es la misma que separa la altura de los árboles de los ojos del poeta y estos del poema que se escribe en una hoja); su tragedia –si se entiende en términos de resistencia sobre el vacío- es en Belo recreativa: frente a la estancia, per-vivencia; ante la soledad, la reflexión (de las sensaciones íntimas) y escritura (de los espacios sociales). Intentar formas de habitar y ser habitado:
[…] o cómo convertir a Dios a nuestra inmaculada vida?
Casi tan agradable como en el invierno meter los pies
fríos en la cama
u oír por la mañana resoplar a la excavadora número seis
y despertar a los funcionarios del sindicato de enfrente
Tan modestos subsidios para una rudimentaria teoría del
envenenamiento
En un ensayo titulado “O correr dos dias”, el poeta portugués inventa esta teoría del envenenamiento como refutación de su escritura poética: «[…] escrever é para mim morrer um pouco, anticipar o regresso definitivo à terra. Escrevo como vivo, como amo, destruindo-me. Suicido-me nas palavras. Violento-me. Altero uma ordem, uma harmonia […] Ao escriver mato-me e mato. A poesia é um acto de insubordinação a todos os níveis, desde o nível da limguagem como instrumento de comunicação, até ao nível do conformismo, da conivência com a ordem, qualquer ordem establecida». En ese sentido, el problema de la habitación de Belo alcanza fuertes posiciones críticas -léase políticas- respecto a la sociedad aburguesada y católica en la que se encuentra instalado, donde De las casa de las mejores familias de la ciudad / sube al caer de la tarde el complejo perfume / de las oraciones transpiraciones defecaciones. Por otro lado, el planteamiento de este problema toca techo en valores metafísicos con el binomio vida-muerte (y el mundo transitado de por medio: Nacemos y morimos y está el mismo sol ahí fuera), claro correlato de otro binomio, creación-destrucción: la alegría es una casa recién-construida // la alegría es una casa demolida // No hay ya más hoja o casa o alegría en donde habitar. Es decir, la muerte (también en metáforas otoñales), como la vida (el renacer de la vida en la primavera de los árboles), es un estado en transición, un eterno ir y volver que sincroniza tiempo y espacio en el (tópico e inefable) instante.
.
A través estas tres dimensiones (política, metafísica y estética), el poeta portugués erige un estado de incertidumbre/esperanza que nunca progresa, si no es en forma de una melancolía tácita que bien resume versos como llegamos tarde y la poesía es vieja oTodos los males nos vinieron contigo, poesía, confirmación de una tradicional labor poética por la que el propio Belo pasa una y otra vez en la construcción-deconstrucción de sus propios poemas: cuantiosas referencias a versículos bíblicos en latín y de la Eneida de Virgilio, así como nombres de ciudades históricas o míticas tales como Patmos, Troya, Roma, Babilonia, etc. Acción ésta, como antes se apuntó, re-creativa, una intertextualidad que abre pasajes comunicativos entre la tradición literaria latina y los poemas de Belo bien referenciados, sobre todo, en sus títulos. Aquí la tradición es un lugar de paso, un lugar donde habitar trans-versalmente.
Feliz aquel que administra sabiamente
la tristeza y aprende a repartirla entre los días
Pueden pasar los meses y los años y nunca le faltará
[…] Pero, poeta, administra la tristeza con sabiduría
Belo bien podría haberse hecho la misma pregunta de Heidegger de ¿para qué poetas en tiempos de penuria?, aunque él, asumida esa penuria (por no decir saudade), sencillamente la reduce: Y yo ¿qué canto?, a lo que él mismo responde con su escritura, con unos versos finales: quizás cantar sea el último recurso y, en otro poema, […] tal vez el fin (o el principio) de los hombres y de los seres.
Maneras de habitar sobre la marcha.
ANTONIO J. ALÍAS.

http://www.antoniomiranda.com.br/iberoamerica/portugal/ruy_belo.html#sTEXTOS EN ESPAÑOL
Tradução de Xosé Lois García

            Empleo y desempleo del poeta

         Dejad que en sus manos crezca el poema
         como el sonido del avión en el cielo sin nubes
o en el sordo verano las mañanas de domingo
No le digais que es mano de obra y además
que el tiempo no está para la poesía

Publicar versos en periódicos que tiran millares
tal vez hasta algunos millones de ejemplaes
¿habrá algo que se le compare?
Grandes mujeres como semíramis
publia hortênsia de castro o victoria colonna
todas aquellas que más intimamente murieron
no hicieron tanto por inmortalizarse

Oh qué agradable es ver a un poeta en ejercicio
llegar incluso a hacer versos por encargo
versos que al leerlos el más astuto crítico en vano buscaría
quién evitase la guerra mayúsculas-minúsculas mejor
Bastante más que la armonía entre los hermanos
El poeta en ejercicio es como aceite precioso derramado
en la cabeza y em la barba de Aaron

Llorad profesionales de la caridad
por el pobre poeta retirado
que ya no sabe a donde ir a buscar los versos
oh que largos son para él los días
ni sabe donde poner las manos


Elogio de la amada

Miradla ubérrima numerosa escogida
secreta llena de pensamientos exenta de cuidados
Viene sentada en la nueva primavera
Cercada de sonrisas en el regazo lírios
ojos hechos de sombra de viento y de momento
ajena a estos días que yo nunca consigo
Le muerde el tiempo en la faz las raíces de la risa
comienza más allá de ella a ser lejos
La amada es la infancia que viene a mí
Hay pájaros antiguos en los límpidos caminos
y muertos como antes nunca más
Miradla cómo se extiende amplia como una patria
en el umbral de nuestra indiferencia
Nuestros atrios son para sus pies solitarios
todos nosotros olvidamos la casa de los padres
ella llena de días nuestras manos vacías
El dolor está en ella hasta que dios comienza
yo bien le siento el talón del amor
¿Qué importa ser de una sola mañana y no haber en cambio
árbol más azotado por los diversos vientos?
¿Qué importa dividirnos en un desmoronamiento de ponientes?
Más triste incluso es la vida donde otros pasarán
multiplicándole la ausência ?qué importa
si donde ponemos los pies es primavera?


Mi tarde

Dispongo del viento del sol dispongo del árbol
tengo pájaros tengo niños
tengo incluso a mi disposición el mar
tal vez con todo esto pueda formar una tarde
una tarde azul y calmada donde me pueda refugiar
Pero ¿y las ideas las doctrinas los problemas?
Si no resolví aún el problema de la uña del dedo meñique
¿cómo pretender Haber resuelto el mínimo problema?
¿Y las ideas que sólo sirven para dividir?
Las ideas tienen húmeros innúmeros
y es difícil caminar en medio de la multitud
Podría decir (pero no me deja descansando):
Soy joven. Tengo por tanto la razón de mi lado
Dejad a los pájaros cantar a los niños jugar
el tiempo no urge el corazón no arde
¿Quién soy? Yo sólo y mi tarde
Los niños con sus vocês blancas
rayan alegremente el cielo azul
pasan las aves con su vuelo rasante
desde sá de miranda hasta jorge de sena
Y el tiempo pasa así. Soy yo y el pasado
Era joven. No tengo la razón de mi lado



Poemas extraídos de HORA DE POESIA 27/28 Año 1983. “Antología de la actual poesia portuguesa”, volume cedido pelo poeta Aricy Curvello para a Biblioteca Nacional de Brasília, reprodução com a autorização do tradutor Xosé Lois García.